5 Consejos para que tu Restaurante sobreviva al Verano

Cuando llega el calor muchos de los clientes habituales que tenemos en nuestro restaurante dejan de aparecer con tanta asiduidad. Las vacaciones y el tiempo libre pueden cambiar muchos de los hábitos que tienen durante todo el año. Sin embargo, este factor lejos de ser una desventaja, puede jugar a nuestro favor. De forma que saquemos provecho a la temporada, con los cambios y el movimiento de gente también podemos captar nuevos clientes e incluso probar novedades con estos.

Si no tienes un restaurante a orillas de la playa o en pleno centro turístico de tu ciudad para ‘hacer el agosto’… no hay por qué alarmarse. No todos salen por vacaciones. Muchos clientes permanecen en la ciudad por trabajo o van y vienen con bastante frecuencia, por lo que vuelven a pasar para sus comidas diarias o de negocios.

Una de las ventajas para continuar con nuestra actividad en verano aunque, quizá, no sea suficiente. ¿Qué podemos hacer para que nuestro restaurante sobreviva al verano?

1. Nuevos menús y productos

• Añade menús especiales, más frescos y veraniegos.
• Haz propuestas con buena relación calidad-precio.
• Sorprende a tus clientes con entrantes novedosos como los nuevos Tenders Barbacoa y Miel, ¡gustarán a grandes y pequeños y son perfectos para compartir!

• Incluye menús ligeros para tapear, con precios cerrados y atractivos para que los clientes te tengan en mente para comer o cenar en sus salidas. Estudia nuevos platos e innova en tu cocina.
• Cambia la carta de bebidas y postres. Incluye cócteles.

2. Actividades en la Terraza

Si tienes una terraza en el local y está bien equipada el verano es casi tuyo. Llama la atención de tus potenciales clientes, haz que se encuentren en un lugar único, apetecible y a gusto para disfrutar de su tiempo libre.

• Debemos tener un buen mantenimiento de la terraza y el mobiliario.
• Cuida el servicio. En el exterior debe ser tan bueno como el de la barra y el salón.

3. Eventos

Organiza actuaciones en directo, promociónalas a través de redes sociales para tener más gente al tanto e interesada en acudir.

Si en tu zona hay otros restaurantes que cierran, sus clientes son ahora potenciales clientes tuyos. Haz lo posible para que tu restaurante sea su alternativa a la hora de salir. Llama su atención con un espectáculo musical, humorístico o una noche temática. Pon variedad a sus noches de verano.

4. Restaurante divertido para niños

El verano y las vacaciones escolares también van unidos. Es momento de tener en cuenta a los clientes más jóvenes y pensar en qué ofrecerles a ellos. Es época de hacer muchas salidas en familia. Se planean actividades con los niños cualquier día de la semana.

Atraer a los niños significa llevar a los padres. Si tu restaurante tiene entretenimiento infantil, opciones para que los pequeños de la casa puedan divertirse y hacer que los padres estén más tiempo disfrutando de la comida o la cena, podrás convertir tu establecimiento en un imprescindible veraniego para padres e hijos.

Algunas ideas que puedes aplicar para que tu restaurante sea atractivo para los niños

• Monitor/a de tiempo libre para niños
• Castillo hinchable en el exterior
• Zona de juegos o parque de bolas
• Habilitar un espacio cercado para jugar y correr
• Espacios con máquinas de juegos y mobiliario infantil

5. ¡Cerrado por vacaciones!

En la mayoría de bares y restaurantes se trabaja a diario más fines de semana y festivos pero, ¿qué hacer cuando llega el verano? Vamos a hacer cálculos para saberlo.

Cada empresario debe tener en cuenta si esos meses son rentables para él. Si abrir toda la temporada le compensa. Es decir, si las ventas caen notablemente para cualquier hostelero cercano y nosotros no somos una excepción, debemos de plantearnos cerrar unos días.

Si tus cálculos apuntan a ello, no son malas noticias porque ahorrarás algunos costes. Aprovecha para reponer fuerzas, descansar y hacer planes. Estudia cómo implementar aquellas ideas que tienes en mente para el local. Y sobre todo, lleva a cabo aquellas reformas que tienes pendientes.

La temporada de menor afluencia de clientes es la más acertada para cerrar el local en cualquiera de estos casos. Es una buena oportunidad para cambiar la carta y sorprender a tus clientes con novedades gastronómicas de cara a la entrada del otoño e invierno.

¿Preparado para sacarle partido al verano?