A lo largo y ancho de nuestra geografía, hay multitud de establecimientos que se están sumando a la tendencia de servir una oferta gastronómica “Caña y Tapa” por un precio fijo. Esta propuesta se ha convertido en un reclamo atractivo para los clientes, ya que por un módico precio pueden disfrutar de una caña bien tirada junto a una tapa elaborada, lo que supone una gran oportunidad para los bares y restaurantes.

Un Atractivo para los Clientes

Cada vez más consumidores buscan opciones económicas pero de calidad para disfrutar de su tiempo de ocio. La combinación de una caña fresquita con un bocado que la acompaña es una estrategia que fomenta el consumo recurrente y permite fidelizar clientes. En muchos casos, este modelo se ha convertido en un elemento diferenciador en la oferta gastronómica de un establecimiento.

Factores que Influyen en el Precio de la Caña y Tapa

El precio dependerá de varios factores que deben ser cuidadosamente analizados para lograr un equilibrio entre rentabilidad y satisfacción del cliente. Para definir un precio justo, es necesario tener en cuenta lo siguiente:

1. La Marca de la Cerveza

No todas las cervezas tienen el mismo coste. El precio del barril varía según la marca, y esto influye directamente en el coste de cada caña servida. Algunas marcas tienen acuerdos con los establecimientos que permiten reducir costos si se elige su distribución en exclusiva, mientras que otras cervezas artesanales o premium pueden implicar un coste más elevado.

Es importante decidir qué tipo de cerveza se acomoda mejor al perfil de cliente que se quiere atraer. Un público joven puede sentirse más atraído por una marca de cerveza económica y accesible, mientras que una clientela más gourmet valorará opciones más exclusivas y artesanales.

2. El Tamaño de la Caña

Cada establecimiento elige el tamaño del vaso en el que sirve la caña, lo que repercute en el precio final. No es lo mismo un vaso de 200 cc que un tubo de 330 cc, y tampoco lo es si se opta por copas especiales que realcen la experiencia de consumo. Existen múltiples opciones de presentación, lo que nos permite ajustar el precio a la cantidad de líquido servido.

Algunas opciones comunes son:

• Caña pequeña (200 cc): Más económica, perfecta para degustar junto con una tapa pequeña.
• Tubo o caña grande (330 cc): Un formato intermedio que ofrece más cantidad sin encarecer demasiado la oferta.
• Cerveza en copa especial (400-500 cc): Ideal para cervezas artesanas o de mayor calidad, con una tapa más elaborada.

3. El Coste de la Tapa

Elaborar una buena tapa conlleva una serie de costos, desde la materia prima utilizada hasta el proceso de elaboración y los costes de mantenimiento. Estos factores deben estar bien calculados para asegurar que el precio final de la oferta sea rentable para el negocio.

No todas las tapas tienen el mismo coste de producción. Algunas son más económicas y fáciles de preparar, mientras que otras requieren ingredientes de mayor calidad y una mayor elaboración. Es importante tener en cuenta:

• La calidad de los ingredientes: Tapas con productos ibéricos, mariscos o carnes selectas tendrán un coste mayor que opciones más sencillas como encurtidos o tortillas.
• El proceso de elaboración: Una tapa que requiere fritura, cocción lenta o presentación detallada tendrá un mayor coste de mano de obra.
• Los complementos adicionales: El uso de pan, picos, salsas o decoraciones extras también influye en el precio final.

4. Complementos Adicionales

Además de la tapa en sí, hay que considerar los elementos adicionales que pueden acompañarla. Pan, picos, salsas y otros acompañamientos pueden marcar la diferencia en la percepción del cliente, pero también incrementan el coste de producción. Decidir si estos elementos se incluyen en el precio o si se ofrecen como extras es una estrategia clave para el control de costos.

Cómo Calcular el Precio Justo

Para determinar el PVP (Precio de Venta al Público) de la oferta de caña y tapa, cada establecimiento debe realizar un escandallo detallado de los costes de cada una de las opciones de tapa ofrecidas. A partir de ahí, se define el margen de beneficio esperado y se ajusta el precio final.

Un equilibrio entre calidad y precio es fundamental para que la oferta sea atractiva y sostenible. La relación entre calidad de la cerveza, cantidad del vaso y calidad de la tapa debe estar bien ajustada para que el cliente perciba que está recibiendo un buen producto por su dinero.

Variedad y Flexibilidad en la Oferta

Ofrecer un surtido variado de tapas es una estrategia efectiva para atraer diferentes tipos de clientes y permitirles elegir la opción que más les apetezca en cada momento. Algunas ventajas de esta estrategia son:

• Permite al cliente cambiar o repetir tapa con cada caña.
• Facilita la adaptación a los gustos de grupos de clientes. En un grupo, es probable que haya preferencias diversas, por lo que dar opciones mejora la experiencia de todos.
• Fomenta el consumo de raciones. Al incluir opciones de tapas en el menú, se pueden promocionar como raciones completas a su precio habitual.

Caña y Tapa: Un Producto en sí Mismo

Es importante recordar que la oferta de “Caña y Tapa” debe ser vista como un producto completo y no como dos elementos separados. No se trata de vender una caña y regalar la tapa, sino de ofrecer una experiencia gastronómica atractiva y rentable.

Esta estrategia también permite ofrecer productos más elaborados los fines de semana, con un ligero incremento en el precio, lo que resulta en una experiencia aún más satisfactoria para los clientes que optan por esta opción de tapeo en lugar de salir a comer.

Estrategia de Éxito.

La oferta de caña y tapa es una estrategia de éxito en muchos bares y restaurantes, pero para que sea rentable y sostenible, es fundamental calcular bien los costos y establecer un precio justo. Factores como la marca de la cerveza, el tamaño de la caña, la calidad de la tapa y los complementos adicionales deben ser considerados para lograr el equilibrio perfecto entre atractivo para el cliente y rentabilidad para el negocio.

Implementar esta estrategia con una variedad de tapas y un control detallado del coste de cada elemento permitirá ofrecer un producto competitivo que atraiga a más clientes y fomente su fidelización. Si se gestiona adecuadamente, la caña y tapa no solo será una forma de diferenciarse de la competencia, sino también una herramienta efectiva para aumentar el ticket medio y potenciar el éxito del establecimiento.