Con motivo de la celebración de una victoria de las tropas del ejército de Carlos V, en la que toman Roma y la saquean. Cuenta la historia, que, con motivo de la celebración, los mandos militares llenaron sus copas de vino, las alzaron al frente y dijeron: «bring dir’s», que proviene del alemán y significa “yo te lo ofrezco”.
Otra versión sitúa esta costumbre en tiempos de los griegos, cuando los más pudientes organizaban banquetes para su deleite o en honor de alguien, los criados servían en las copas a todos los invitados y el anfitrión alzaba su copa y tomaba un trago, como señal de que aquella bebida era buena y no tenía veneno alguno.